Un hombre esta cómodamente sentado, paciente, no necesita cambios por lo tanto no los busca ni se fija si existe la posibilidad de un cambio.
Un día este hombre se para y observa el camino y a su vez observa la silla donde estaba sentado, en ese momento pueden suceder dos cosas.
Fijar el camino y comenzar a recorrerlo o volver a centrase; esto dependerá de su «necesidad».
Pero es muy posible que después de ese momento de decisión, ante la alternativa de volver a sentarse, haya un cambio.
Que la silla no este mas y si en cambio un sillón de espinas.
La elección es de cada uno, el tiempo ya esta limitado.
Dario Tursarkisian
Fundador de La Universidad del Alma
Investigador histórico – científico – espiritual
Instructor metafísica universal